King's Cage

Título: King's Cage
Saga: Red Queen, #3
Autora: Victoria Aveyard
Año de publicación: 2017
Género: distopía, fantasía, romance, young adult
Nº de páginas: 528
Editorial: HarperTeen

Mare Barrow is a prisoner, powerless without her lightning, tormented by her lethal mistakes. She lives at the mercy of a boy she once loved, a boy made of lies and betrayal. Now a king, Maven Calore continues weaving his dead mother's web in an attempt to maintain control over his country—and his prisoner.

As Mare bears the weight of Silent Stone in the palace, her once-ragtag band of newbloods and Reds continue organizing, training, and expanding. They prepare for war, no longer able to linger in the shadows. And Cal, the exiled prince with his own claim on Mare's heart, will stop at nothing to bring her back.

When blood turns on blood, and ability on ability, there may be no one left to put out the fire—leaving Norta as Mare knows it to burn all the way down.

O P I N I Ó N

👹 ATENCIÓN: Contiene spoilers de Red Queen y Glass Sword, ¡huye! 👹
Los aesthetics no me pertenecen. Pincha en la imagen para ir a la página del autor/a.

Hacía tiempo que no subía una reseña, ¡pero ya estoy aquí! Y con un libro que tenía unas ganas tremendas de leer: King's Cage, la tercera parte de Red Queen, una de mis sagas favoritas. Casi perfecta. Mare, la protagonista y narradora principal de la historia, es una plasta. De hecho, ¿podríamos quitarla de aquí y seguir con la historia como si nada? Por pedir. 

Es muy difícil hacer la reseña sin estropearle la lectura a nadie, así que ya he avisado que es posible que haya algún que otro spoiler de las dos primeras partes. Por necesidad. King's Cage lo retoma donde Glass Sword lo dejó: Maven tiene secuestrada a Mare y la pasea con un collar de perro para que todo el mundo sepa qué clase de monstruo mató a su madre. ¡Qué persona tan horrible! *Ironía mode on* No, mira, es que Mare es insoportable. Hasta yo se lo haría. Y sí, comienzo esta reseña criticando a la protagonista, porque puedo. Porque a esta chica no hay quien la trague. Me recuerda mucho a Eadlyn, así que imaginad.

La primera parte del libro se me hizo un poco lenta. Todo lo contrario que el libro anterior, que leí en un abrir y cerrar de ojos. King's Cage comienza con la nueva vida de Mare como mascota personal del rey de Norta: la jaula de Silent Stone en la que la ha encerrado (en la que ella misma y su ego casi no caben), sus carceleros, la comida, las vistas, etc. Sin embargo, me despertó el interés cómo se va desarrollando la relación entre Maven y Mare, como ella quiere y no quiere verlo a todas horas, y entonces comencé a leer sin parar. No me puedo creer que siga enamorada de el Maven que Elara creó para ella. Aunque, mira, ya somos dos. En fin.

En Twitter comenté que tengo un dilema muy grande con Maven: lo he amado y lo he odiado. Sé que está mal que me guste una relación tan tóxica como la que existe entre él y Mare, ¡pero no puedo hacer nada! Me va el salseo. Además, en esta tercera parte, la autora nos cuenta cómo Maven ha llegado a ser así y por qué. Todo tiene que ver con su madre, Elara. Os recuerdo que la antigua reina de Norta pertenecía a la casa Merandus, cuya habilidad es manipular la mente. Os podéis hacer una idea. En fin, ¡que siempre se acaba encariñando una del malo malísimo! Así no se puede ir por la vida, lo sé.

Sin embargo, Cal, un personaje que me pareció muy bueno en la segunda parte, en esta casi me ha resultado indiferente. Está ahí y hace sus cosas de príncipe renegado y soldado a tiempo completo, pero no tiene mucho más papel que ese. Es más, su único cometido es estar con Mare cuando le toca y vagar por los pasillos como un alma en pena. ¡Qué cansancio! No le culpo, porque no vive una situación fácil, pero incluso Farley, que lo está pasando mucho peor, le está echando más ganas.

Maven y Farley, los dos personajes estrella de King's Cage, al menos para mí. Farley no me gustó nada en Red Queen, pero me sorprendió muchísimo en Glass Sword. Ahora, me en-can-ta. Es una mujer fuerte, valiente y con unos principios de hierro. Tiene mucho carácter, pero es también capaz de mostrar su lado maternal cuando es necesario. Espero que Aveyard se comporte como un ser humano decente y le dé el final que se merece. Aunque sé que es mucho pedir, porque lleva una diana en la espalda todo el tiempo.

En cuanto a la trama, no me quejo. Ya he dicho que es algo lenta al principio pero, una vez que comienza la acción,  ya no para: es una montaña rusa. Tiene momentos muy buenos y otros más calmados. Para mí, ha sido un buen equilibrio. Como es costumbre en esta saga, el final me ha dejado con la boca abierta y unas ganas tremendas de seguir leyendo. Tengo entendido que la cuarta parte será la última, así que espero muchos giros y muchos "voy a volver a leer esto, que lo tengo que haber leído mal, porque no puede ser".

Una de las cosas que me ha resultado más interesante es la variedad en los puntos de vista. Ya he dicho que Mare no me hace mucha gracia, así que los capítulos narrados por Cameron, a quien no le gusta nada Mare, y Evangeline, que tampoco la tiene en mucha estima, me han encantado. Me parece que la autora se ha dado cuenta de la necesidad de introducir una nueva perspectiva, algo que no esté centrado exclusivamente en el personaje principal, ya que no da más de sí: es egocéntrica, cabezota y desesperante.

En resumen, Victoria Aveyard nos lanza de nuevo al mundo de Red Queen de la mano de una protagonista no-muy-agradable (por decirlo suavemente), pero lo arregla un poco ofreciéndonos un nuevo filtro con el que apreciar a Maven y dos nuevos puntos de vista muy entretenidos. Una historia amena, con sus altibajos, pero que no me ha decepcionado nada de nada. ¡Ahora sólo queda esperar a la última parte!